Noche de dulces

mmmmmmm, sí, así se nos hizo la boca ese día. Es que nos dieron tantos, pero tantos dulces ricos. Fue super, nos fuimos juntando de a poco todos los amigos del barrio: estábamos el Gaspar y yo (los primeros obvio), luego llegó la Emilia, la Mara, la Catita con un amigo, más tarde se sumó el Nico (por suerte, porque cuando pasamos por su casa lo estaban acostando y el pobre se quedó mirando por la ventana, cómo nosotros lo pasábamos increíble) Ibamos paseando con varios papás y mamás....que pedían pisco sour o cervez en vez de dulces, ¿qué raro no? Cuando ya nos cansamos nos fuimos a la casa de la Emilia y ahí nos quitaron los dulces (buhhhh), 'hasta mañana' dijeron las mamás...pero entre medio llegó el Feli y agarró todos los dulces de 'hasta mañana' y se los regaló a los niños guailones que pasaban en la noche pidiendo dulces... y así termina la historia de nuestro día de brujas, que en realidad fue más bien de princesas, escolotadas por un abejorro...